Los desafíos que están llevando el trabajo a distancia a fracasar
Los desafíos del trabajo a distancia dejaron de ser tecnológicos hace mucho tiempo. La práctica de trabajar a distancia iba creciendo poco a poco en las organizaciones hasta que la pandemia nos tomó por asalto y nos obligó a adoptarla de manera intensa. No se puede esperar que alguien pase de un contexto a otro sin afectar su rendimiento e incluso su bienestar.
Se ha mencionado que estamos viviendo el mayor experimento de trabajo a distancia en el mundo y el riesgo de que este experimento fracase es, sentenciar que el trabajo remoto no es tan efectivo como trabajar en una oficina. Si tenemos cubierta la tecnología para seguir comunicándonos y colaborando con nuestros equipos de trabajo ¿Cuáles son los desafíos que debe superar este experimento? ¿Cómo convertir el trabajo remoto en una práctica común y no temporal?
Los desafíos que percibimos en el trabajo a distancia
Quienes están probando por primera vez las mieles del trabajo remoto seguramente han experimentado altibajos. Las primeras etapas pueden ser emocionantes, dejar de ir a la oficina, evitar los desplazamientos, tener más tiempo para la familia y actividades que te gustan. Pero después de unos días, comienzas a sentirte invisible para la empresa, al mismo tiempo que tienes que lidiar con una abrumadora carga de trabajo y una motivación por los suelos.
El desvanecimiento de las conexiones interpersonales y la falta de motivación, son desafíos a los que debemos poner atención para mantener a los miembros de nuestros equipos de trabajo saludables y productivos.
Desvanecimiento de las conexiones interpersonales
Las conexiones que se formaban cuando las personas se encontraban en los pasillos de la oficina muchas veces eran de provecho, incluso algunas organizaciones, como Pixar, diseñaban sus oficinas para que estos encuentros casuales sucedieran repetidamente durante el transcurso de la jornada laboral y mencionan que es difícil calcular lo valioso que resultan estos encuentros.
“La mayoría de los edificios están diseñados para algún propósito funcional, pero el nuestro está estructurado para maximizar los encuentros involuntarios. En el centro hay un gran atrio, que contiene la cafetería, salas de reuniones, baños y buzones. Como resultado, todos tienen fuertes razones para ir allí”, menciona Ed Catmull, cofundador de Pixar.
Esas conexiones significativas, de valor e incluso divertidas, se deben mantener aun trabajando en casa. Pero ya no podemos dejar que sean obra de la casualidad, necesitamos hacerlas intencionales para que cada uno de los miembros de nuestro equipo sigan teniendo estos vínculos. Aquí algunas recomendaciones:
- Establece la hora del café virtual. Puedes asignar en el calendario una reunión para hacer una pausa y tomar un café con el equipo de forma remota. Para no perder por completo el toque de “encuentro casual”, pueden unirse todos a Zoom y dividir salas de forma aleatoria para que queden 2 o 3 personas y convivan por unos 20 o 30 minutos.
Puedes organizar una dinámica que rompa el hielo para que las personas se sientan en confianza, se desconecten del trabajo y se conecten al café virtual.
- Aprovecha un momento para celebrar. Si fue el cumpleaños de alguien del equipo o consiguieron un hito importante en su proyecto, no lo dudes, ¡Hay que celebrarlo! Recientemente, los miembros de un equipo de trabajo de las distintas oficinas de Proyectum en Latinoamérica, decidimos aprovechar un viernes por la tarde para celebrar los logros de nuestros más recientes Sprints.
Falta de motivación
La incertidumbre que estamos viviendo la gran mayoría de las personas es normal. Al hablar con mis compañeros de trabajo, hemos intercambiado los miedos que cada uno tiene, entre los que destacan, por supuesto la enfermedad, la inminente crisis financiera y el miedo a no saber adaptarse a la “nueva normalidad”.
Está desorientación que seguramente tú estás percibiendo contigo mismo y con los miembros de tu equipo de trabajo afecta la motivación y como consecuencia el rendimiento.
Como líder tienes que actuar de forma estoica en esta situación, aquí puedes conocer más respecto al tema, debes generar un ambiente de confianza, dejar que el miedo se apoderé de tu equipo puede ser paralizante y destructivo.
Hoy más que nunca debes poner a prueba tu habilidad para ser empático, debes desarrollar una curiosidad genuina por el sentir de cada uno de los miembros de tu equipo. Puede ser tan sencillo como preguntar de forma sincera “¿Cómo te puedo ayudar?”, te sorprenderás de que la gran mayoría de las veces, las personas no están buscando que les des una solución, simplemente quieren que los escuches.
Reflexiones finales
Este gran experimento de trabajar desde casa se da como consecuencia de un problema que no sabemos con certeza cuándo lograremos superar. Pero ante este ambiente de incertidumbre es cuando más me hace sentido la filosofía ágil, que plantea tener la voluntad para adaptarse y aprovechar el cambio.
Veo más probable que este “experimento” se convierta en nuestra nueva realidad y trabajar en una oficina sea cosa del pasado, a que llegue a fracasar. La tecnología la tenemos, es momento de adaptarnos y aprovechar el cambio. Como dice el autor Jason Fried en su libro Remote, Office not required: “La tecnología está aquí; nunca ha sido más fácil comunicarse y colaborar con personas de todas partes, en cualquier momento. Pero eso sigue dejándonos con el problema fundamental de las personas. Lo que falta es la actualización de la mentalidad”.
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